Cartas al Dr. Cariño 2

Querido Dr.
Le cuento que soy una fanática de su columna. Lo que más admiro de usted es la franqueza con que dice las cosas, además de lo pedagógico de su vocabulario. Ahora paso a contarle mi verdadera verdad: La persona que le escribió anteriormente que firmo como excellito y su enamorada (dejare el nombre de ella en reserva porque es una dama) son mis compañeros de trabajo, los cuales me utilizan como pantalla distractora para ocultar su relación amorosa, lo que me tiene muy mal porque todos me molestan con Excell y yo no puedo defenderme, solo tengo que poner cara de Lavin y reírme. He pensado varias veces en contar la verdadera verdad, de echo a veces sueño que estoy en el auditorio de Funch y saco de un empujón a José Pablo Arellano (es su presidente Dr. Para que se enchufe) y les cuento a todos lo que esta pasando. Pero la verdad es que este es un pelo de la cola Dr. Al lado del verdadero problema por el cual le escribo y que me tiene realmente angustiada. Lo que pasa es que a Excell no le vasto con usarme de pantalla para ocultar su romance, sino que más cacha me presento un Extraño del cual me enamore profundamente, la verdad que él es muy extraño, a veces le dan unas pataletas bien terribles, a mí me da un poco de miedo igual porque no solo es extraña su forma de ser, sino que es un desconocido que Excell recogió en Casa Blanca, con el único propósito de que yo me enamorara y así poder chantajearme en caso de que yo quisiera contar la verdadera verdad que le señale anteriormente. Lo peor Dr. que su plan dio resultado y ahora mi extraño fue aceptado en una universidad española que supongo que debe ser bastante extraña, y se va por 3 años hacer un Doctorado, después va hacer igual que usted Dr., eso es lo único que me alegra vioooooo. La cosa es que yo no quiero que se vaya, y es aquí donde necesito sus sabios consejos, he pensado en varias cosas, como raptarlo y llevármelo para convarbala que aún no sé si existe, romperle el pasaje y echarle la culpa a una loca de patio que me tiro el humo en un carrete (eso se lo cuento en otra carta porque es para largo) llevarlo a las vegas emborracharlo y casarme con él, o llevarlo al hospital el peral para que le hagan un diagnostico psicológico, más que seguro que lo dejan recluido, porque de verdad Dr. No es hueveo es muy extraño. ¿Qué opina? ¿Cuál de los caminos me llevara a ser feliz? Por favor solo usted podrá ayudarme a ver la luz a través del humo que aún tengo en los ojos por culpa de la loca de patio de su admiradora.

Lo admira y le quiere
Topacio